viernes, 8 de enero de 2016

EL SISTEMA HOPLÍTICO

Hoplites




Puesto que hemos hablado de algunas de las batallas más conocidas de la Antigua Grecia, hoy trataremos un tema relacionado, el sistema militar hoplítico.

El sistema hoplítico comienza a mediados del siglo VII a.C. y llegará incluso a influir en Roma que mimetiza la idea del guerrero-ciudadano. El sistema político griego se organiza en ciudades-estado independientes entre sí. Estas “polis” se consideran hermanadas puesto que comparten cultura, lengua, religión y tradiciones, pero las rivalidades entre ellas se consideran algo habitual.

El guerrero hoplita se considera infantería pesada y destacaban por su gran fortaleza defensiva. Portaban, un escudo cóncavo y circular, que da nombre al hoplita (hoplon) y que se sostenía con el brazo izquierdo. Este escudo cubría la parte izquierda del guerrero y dejaba libre el brazo derecho para portar una gran lanza de dos metros de altura. Además, los hoplitas luchaban en formación de “falange”, con lo que, además de cubrir su parte izquierda con su propio escudo, cubrían y eran cubiertos, de forma recíproca, en la parte derecha del cuerpo con el escudo del compañero. En cuanto a la cabeza, era protegida por un yelmo, normalmente de material metálico. El resto de la armadura la componían unas grebas que protegían las piernas y coraza para el tronco. Todo ciudadano con plenos derechos que podía costearse la “panoplia” o conjunto de protecciones y armas hoplitas, era susceptible de pertenecer al ejercito hoplítico.


Posiblemente la gran revolución que supuso el sistema hoplítico en el ámbito militar fue que a partir de ese momento la fuerza de la unidad residía en el conjunto y no en el individuo.



hoplita

lunes, 4 de enero de 2016

LA SOCIEDAD ESPARTANA

TerritorioEspartano

Las sociedad espartana era una sociedad de guerreros extremadamente rigurosa, no admitían a nadie que pudiese ser débil, por ejemplo, si un bebe tenía cualquier mínima imperfección lo llevaban a un colina sagrada para dejarlo morir allí, lo único que importaba eran los beneficios que el niño reportaría al estado.


Para darnos cuenta del régimen de vida en aquella sociedad, tan solo dos tipos de personas podían tener una lápida con su nombre, un hombre que moría en combate y  una mujer que moría en el parto, ya que los dos actos se consideraban dar la vida por el estado.

A la edad de 7 años, todo niño espartano era alejado de su familia para ingresar en los campamentos de instrucción militar. Su educación se centraba en la destreza militar, la disciplina y la dureza. Para asegurarse de que los chicos eran duros, se los azotaba en grupo hasta que sangraban, y el que más resistiese, recibía grandes honores. A medida que crecían, el nivel de violencia aumentaba, estos adiestramientos podían incluso resultar mortales. Era un modo de prepararlos para ver morir en los campos de batalla a sus amigos y camaradas de juventud.

Los espartanos fueron los primeros profesionales de la guerra entre los ciudadanos de las polis. 



Hoplita soldado espartano


“Regresa victorioso con tu escudo o como un cadáver sobre él.”

LA BATALLA DE MARATÓN

En  el  contexto de las luchas entre griegos y persas vamos a ver hoy la “batalla de Maratón”, entre Atenienses y Persas. De dicha batalla ha llegado a nuestros días la modalidad atlética del “maratón” al cual da nombre la llanura en la que tuvo lugar la batalla.


Euphronios krater side B MET L.2006.10


En el año 490 a.C,  en los campos que rodeaban la población de Maratón, a pocos kilómetros de Atenas, tuvo lugar el enfrentamiento armado entre 30.000 soldados persas y 11.000 atenienses, batalla que definió el desenlace de la primera de las guerras médicas, el nombre con que se conoce la sucesión de enfrentamientos entre el imperio persa y algunas de las ciudades-estado griegas, durante el siglo V a.C, y que señala el comienzo del periodo clásico en Grecia.



Athenian hoplite




El rey persa Darío I deseaba invadir y conquistar Atenas, como castigo por su participación, años antes, en la revuelta Jónica. La desproporción de fuerzas entre ambos ejércitos hizo que la victoria griega se convirtiese en uno de los hitos militares de la Antigüedad. Es recordada en nuestros días por la proeza de Tersipo, quien recorrió a la carrera el camino desde maratón hasta Atenas para anunciar su victoria, esfuerzo que le costó la vida. Los cuarenta y dos kilómetros que separaban ambas ciudades, hoy en día continúan siendo la distancia del maratón olímpico, aunque desde los juegos Olímpicos de Londres, se le añadieron arbitrariamente 192 metros. La leyenda continua viva en la memoria de Occidente, desde hace 2500 años.

Tumulus (tomb) in Marathon